A los 30 años, Sofia Rito Enocsson, sueca hija de padre uruguayo, hará su debut olímpico y será la primera mujer en defender a Uruguay en halterofilia (levantamiento de pesas) en la máxima cita del deporte mundial.
En el otoño sueco de 2012, un amigo le recomendó a Sofia hacer pesas y ahí comenzó una historia que desembocará en Río de Janeiro. “Había practicado muchos deportes a lo largo de mi vida, pero me engancharon con las pesas y me enamoré”, le contó a Ovación.
En 2013, Julio Rito, padre de Sofía, se contactó vía mail con Julio Lezama, presidente de la Federación Uruguaya de Pesas y allí se comenzó a barajar la posibilidad de que la nacida en Estocolmo defendiera a Uruguay en competencias internacionales.
“Desde que empecé me propuse entrenar para estar en muy buen nivel”
Un año más tarde, Julio y Sofía vinieron de vacaciones a Brasil y en su paso por Uruguay, la deportista conoció el entorno de esta disciplina a nivel local y si bien antes ella ya se había entrenado con la selección sueca, optó por defender a la Celeste. “Prefiero Uruguay”, dijo en ese entonces y de ahí en más se hicieron los trámites correspondientes para que sacara el pasaporte y empezara a competir en torneos internacionales que iban a ser clasificatorios para los Juegos Olímpicos.
“En mayo de 2015 solicitó el pasaporte y justo sobre la hora logró inscribirse al Mundial”, le contó Julio Rito a Ovación agregando que en ese año “Sofía tuvo dos competencias de importancia”.
“El apoyo de mi familia, de mi novia (la atleta brasileña Faby Moraes) y de todos los que me dan su ayuda fue clave para lograr la marca y estar viviendo un sueño”
En el Mundial de Houston 2015 y en el Preolímpico de Cartagena disputado este año, Rito Enocsson logró la marca mínima para competir en los Juegos Olímpicos en 53 kilos y el 23 de junio tras una redistribución de cupos por casos de dopaje en esta disciplina , consiguió su pasaje a Río.
“Es un sueño hecho realidad”, dijo Sofia, quien entrena durante medio día y luego trabaja en un restaurante tipo americano en Suecia. Una de las razones por las que se dedicó a este deporte, según contó, fue que “quería perfeccionarme para crecer como deportista en el Uruguay y mostrar que es posible que las mujeres lleguen lejos”.
Respecto a los objetivos en Río 2016, Sofia Rito Enocsson fue clara: “La apuesta es tener una buena actuación, disfrutar de los Juegos y conseguir un buen registro personal”. La última vez que viajó a Uruguay fue para la Navidad de 2014. “No voy tanto como me gustaría. Amo a la gente y me encantan las comidas, sobre todo el asado”, resaltó. La sueca hija de uruguayo remarcó y agradeció el apoyo de la federación y expresó que “es un honor tener esta oportunidad de defender a Uruguay”.
En 1974, Julio Rito (64 años) se fue de Uruguay porque “acá estaba todo muy mal”. Era época de la dictadura militar y Rito primero viajó a Argentina, donde fue detenido pero un año más tarde logró irse a Suecia por un amparo de Acnur, la agencia de Naciones Unidas para refugiados. Allí se radicó, estudió economía, Ciencias del Cine y luego fue fotógrafo durante más de 20 años. “Voy a Montevideo cada muerte de obispo”, le contó Julio Rito a Ovación desde Suecia.
El padre de la primera mujer que defenderá a Uruguay en halterofilia en unos Juegos Olímpicos no ocultó la alegría por la clasificación y expresó que “es un orgullo enorme y algo que no sabemos si se va a repetir, por eso lo que más deseo es que se divierta y que no tenga ninguna presión porque estar en ese lugar no es cosa de todos los días”. Fiel a la relación padre-hija, Julio remarcó el logro y cerró diciendo que “Sofía Rito Enocsson es el orgullo celeste en Suecia, es una mezcla de garra Charrúa con fuerza vikinga”.