El año 1959 fue especial para el continente dado que se disputaron dos Campeonatos Sudamericanos. Entre marzo y abril el estadio Monumental de Núñez, en Argentina, fue la casa del primero de los dos campeonatos. La albiceleste se hizo fuerte en su casa y conquistó el torneo por lo que se decretó bicampeona tras haber logrado el Campeonato Sudamericano de Perú 1957.
Con esas dos distinciones Argentina había alcanzado a Uruguay en la cima de los ganadores del continente, con nueve torneos cada uno. Por esta razón el torneo celebrado en Ecuador en el mes de diciembre era especial. Ambas selecciones tenían la oportunidad de posicionarse como el Rey de América. El torneo tuvo cinco equipos participantes y se le dio carácter de extraordinario. Participaron Uruguay, Argentina, Ecuador, Paraguay y Brasil, que fue representado por la selección de Pernambuco. Juan Carlos Corazo, abuelo materno de Diego Forlán, fue el entrenador de la celeste. Fueron 21 los jugadores que formaron parte del plantel y Nacional fue el equipo que aportó más, con cinco. Lo siguieron Rampla Juniors, Sud América y Liverpool con tres, Racing y Defensor aportaron dos cada uno y Wanderers, Cerro y Danubio tuvieron un jugador seleccionado.
El debut fue ante los locales, en un partido que se preveía complicado pero que resultó fácil. Uruguay venció por 4-0 con goles de Alcides Silveira, Guillermo Escalada, Mario Bergara y Domingo Pérez y comenzó el torneo con el pie derecho. En la segunda fecha llegó el turno de enfrentar a Brasil, un rival que no contaba con todas sus figuras por lo que no se creía tan complicado. La celeste hizo un buen partido y venció por 3-0 gracias a un tanto de Escalada, otro de Bergara y el tercero anotado por José Sasía.
Los resultados conseguidos dieron la posibilidad a la celeste de conseguir el título en la tercera fecha, aunque debía enfrentar al rival más duro del torneo: Argentina. Pero lo que parecía en la previa se disipó dentro de la cancha. La celeste goleó por 5-0 con un triplete de Silveira, un tanto de Bergara y otro de Sasía y conquistó el Campeonato Sudamericano a falta de una fecha para terminar. Ya coronado, Uruguay salió a cumplir con el calendario ante Paraguay y aunque no pudo superarlo si mantuvo el invicto. Fue empate 1-1 con un tanto de José Sasía y así los charrúas consiguieron su décimo título, superaron a Argentina y se colocaron como los más ganadores de América. Una curiosidad de este torneo fue que fue el comienzo de la gloriosa historia de la familia Forlán Corazo. Juan Carlos Corazo se quedó con el título, que luego conquistarían Pablo Forlán y Diego Forlán en años posteriores.