La FIFA lo sacó del Mundial. Fue suspendido por nueve partidos con la Celeste y se le impuso una sanción de que durante cuatro meses no podía participar en ninguna actividad deportiva, sanción que luego sería reducida a la mitad. Además, debió pagar una multa de 100 mil francos suizos, lo que equivale a unos 112 mil dólares.

Pero no solo lo castigaron deportivamente, sino que literalmente lo echaron de Brasil 2014. "Me trataron peor que a un barra brava. Sacarme de un Campeonato Mundial, no entrar a un estadio… Es algo inexplicable que nunca lo voy a entender. Ellos me seguían, tenían fotógrafos por todos lados. Tenía un dolor y culpa enorme por haberme equivocado, pero fue demasiado", reconocería Luis un tiempo más tarde. Sin embargo, aunque los dos años sin la selección no se los devolvería nadie, todo se dio vuelta. El 27 de mayo del 2015 se desató en Zúrich el escándalo de corrupción conocido como el “FIFAGate”. La fiscal estadounidense Loretta Lynch explicó que a partir de esa fecha se iniciaba una investigación a 18 altos dirigentes por haber aceptado sobornos y comisiones desde inicios de la década de 1990. Los mismos que lo habían juzgado, comenzaban a caer y desde la propia cúpula de la federación.

Finalmente, fueron 36 las personas que terminaron en manos de la justicia, más otros ocho que fueron suspendidos en sus cargos, entre ellos el mismísimo Joseph Blatter, presidente de la FIFA. Ocho meses después, Gianni Infantino asumió la presidencia de la FIFA y terminó con el mandato de 17 años de Blatter, que pese a haber sido reelecto se vio obligado a dejar su cargo.

Entre medio, pese a su espectacular año en Barcelona, la FIFA lo dejó sin siquiera estar nominado al Balón de Oro. Lionel Messi (finalmente ganador de dicha distinción), Neymar y un sorpresivo Cristiano Ronaldo que no había cosechado títulos, conformaron la terna. Luis Suárez fue invitado por su actuación en el Mundial de Clubes, pero prefirió no asistir, enviando un claro mensaje. "Me invitaron a la gala del Balón de Oro con la excusa de haber sido el mejor jugador del Mundial de Clubes. No creo que hayan invitado anteriormente a ningún otro jugador que hubiese ganado ese premio. Dio la coincidencia que a mí me quisieron invitar", señaló.